Les platico de un descubrimiento y les
recomiendo un concierto multimedia.
Compro lavadoras, refrigeradores,
colchones o fierros viejos que venda. Cada vez que Sofía escucha
este canto en la calle, se emociona. Si está platicando, hace una
pausa en el tema, escucha con atención y reproduce lo que dice la
voz.
No le he preguntado qué imagina cuando
escucha ese canto por las calles. Tal vez se imagina a una señora
caminando como buen errante y repitiendo la misma estrofa por toda la
Ciudad. O tal vez, no me sorprendería, se imagina a un grupo de
lavadoras y refrigeradores saliendo de sus casas para encontrar mejor
vida en el retiro, después de tantos años de servicio. ¿Qué
pasará por esa mentecita brillante cada vez que escucha esa voz?
El ropavejero. Un oficio de tradición
en la Ciudad. Escuchar el canto del ropavejero ya no era sorpresa
para mi, hasta que mi hija lo entonó por primera vez. Es un
paréntesis dentro de la modernidad, donde sigue existiendo el
mensaje calle por calle, el ropavejero de confianza. Ya sea en
camioneta o en caballo, se sigue viendo pasar con su canto singular.
Ayer Sofía y yo regresábamos de la
escuela. A lo lejos se escuchó el canto, Sofía lo empezó a imitar.
A un lado de nosotras pasó una camioneta de redilas, con un altavoz
y una fila de colchones de diferentes tamaños. Le dije a Sofía
“Mira, de ahí sale la canción”, mi hija dejó de caminar y
dedicó toda su atención al gran camión con el altavoz. Los ojos de
Sofía trataban de grabar todo lo que veía: El camión rojo, los
colchones usados, los dos jóvenes sentados en los colchones;
mientras se repetía una y otra vez la voz de la mujer. Sentí un
apretón de manos, que me indicaba que estaba emocionada.
Sofía no dijo nada. El camión se
perdió de la vista hasta el final de la calle. Seguimos nuestro
camino.
Sofía le puso imagen al canto.
En la noche, antes de dormir, se
escuchó a lo lejos: Llévese sus ricos y calientitos tamales
Oaxaqueños... Sofía lo escuchó y le hizo eco. Un sonido más por
descubrir en la Ciudad.
Para los papás: Hablando de imágenes
y sonidos. Les cuento que este sábado 25 de agosto a las 19hrs. en
el auditorio Blas Galindo de Cenart, se presentará el concierto
multimedia: Estampas de México, donde el guitarrista mexicano Morgan
Szymanski tocará
música de Julio
Cesar Oliva y Manuel M. Ponce, mientras el imagenero Mario Márquez
Lartigue hace una proyección en vivo de la obra de 20 artistas
plasticos de diferentes partes de mundo. Para que vean un avance de
este concierto, den clic aquí.
Más
información: Auditorio
Blas Galindo: Río Churubusco 79 Calz. Talpan
Costo:
$150.00
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