18.10.11

Disfrutando la Roma

Te recomiendo un restaurante y una mezcalería en la Roma. Para los niños, los invito a que bailen con sus abuelos



El sábado pasado salí con mis hermanos, como hace bastante tiempo no lo hacía. Sofía se quedó con su papá y su abuela. Tuve una tarde relajada de ponerme al tanto de la vida de mis amigos y hermanos.



Primero, fuimos a comer.


Estábamos sentados en un lugar de encuentro. Los señores de 70 años, llegaban con trajes impecables y las señoras (de la misma edad de los señores) brillaban con sus atuendos de calle. Sombreros, joyas gastadas, zapatos lustrosos, maquillaje por doquier. Todo esto sucedía mientras nos traían los platillos estilo alemán.



Este es el ambiente del restaurante Mirabel, ubicado en San Luis Potosí esquina con Mérida. Col. Roma. Uno de los lugares clásicos de la Colonia Roma, antes de que tuviera el auge que tiene ahora. Antes de que se pusiera de moda, ya estaba el Mirabel dando historias para contar en esta ciudad.



El restaurante Mirabel, es de cocina alemana, entre sus especialidades está la salchicha asada y el chamorro, que a primera vista parece una aventura gastronómica, pero una vez que lo pruebas es una delicia. También se especializa por las cervezas de barril que ofrece. Todas ellas las sirven con un tarro y un plato, como si te estuvieras tomando una taza de té.



Los sábados por la tarde, alrededor de las tres, empiezan a llegar los invitados habituales de este recinto. Todos toman sus lugares y se preparan para ordenar sus alimentos. Al mismo tiempo, el grupo empieza a tocar canciones de la década de los cincuentas, los clásicos de Agustín Lara, entre otras piezas musicales. En algún momento de la comida, el grupo cantó "bésame mucho" y una señora que estaba sentada a un lado de nosotros, que vestía saco café tipo de Ming, con lentes oscuros y perfectamente maquillada y enjoyada, se puso de pie y en voz alta nos dijo a todos los comensales presentes: "Viva Consuelito Velázquez, autora de esta canción" Todos aplaudimos al unísono, por el recuerdo de Consuelito.



El micrófono empezó a rondar por todo el salón principal del restaurante. Todos los comensales cantaban. Se arreglaron ese día para ir al restaurante de su barrio y pasarla bien con los vecinos, compañeros de vida, recordando las canciones que los hacían vibrar en su juventud. Doña Chelita, cantante del grupo, nos agradeció de estar ahí: "que bueno que vengan jóvenes, porque luego digo que esto parece la PGR: Pura Gente Ruca" Con ese chascarrillo se alejó de nuestra mesa para seguir cantando. Lo que yo veía era gente que se quería divertir sin importar la edad. Que maravilla.



Toda la gente de todas las edades, se quiere divertir. El restaurante Mirabel es una prueba de que las tradiciones en esta ciudad siguen existiendo, a pequeña escala, como este lugar pequeño que alberga a los antiguos habitantes de la maravillosa Colonia Roma. Larga vida al Mirabel, larga vida a sus tardes de bohemia, que como dice Doña Chelita, los jóvenes debemos visitar más seguido.



Después, fuimos por mezcal.



Otro lugar que conocí el sábado es la mezclaría educativa Vulgar,ubicado en San Luis Potosí 196-B. Este lugar es nuevo y proyecta el auge que hay en estos días por los mezcales. Lo interesante de esta mezclaría, es que sí te educa en el tema del mezcal, porque los dueños se dedican a viajar por toda la República Mexicana para encontrar nuevos mezcales. Buscan y venden lo que sean hechos artesanales y por familias que por tradición saben de la producción del mezcal. En este lugar uno encuentra que el mezcal no solo es el elixir de sabor tostado, sino que hay varias historias, productos y sobre todo, mística alrededor. Por ejemplo, me enteré que hay miel que se hace del agave del mezcal. 


En Vulgar, todo gira alrededor del mezcal. Sirven unos nopales salteados con mezcal, deliciosos y tienen un coctél de mezcal con pepino, bastante interesante. La comida también es bastante buena, tienen requesón con chapulines, tlacoyos de requesón y frijoles, gorditas de chicharrón, todo esto acompañado de una salsa molcajeteada deliciosa. Les recomiendo esta mezcalería, se la van a pasar muy bien.



El sábado fue un buen día, de risas, anécdotas y recuerdos con mis hermanos. Además de la compañía, lo que le dio el toque especial, fue descubrir antiguos y nuevos rincones de la Colonia Roma.



Para los niños: Cuando vi a los señores elegantes y a las señoras arregladas del Mirabel, no pude dejar de pensar en los bisabuelos y abuelos de Sofía. Mi mamá ya le enseñó varias canciones de César Costa y mi papá, algunas del Tío Herminio. Ahora se me antojó que mi hija pase una tarde con sus bisabuelos, platicando de cómo era su mundo cuando eran niños y qué canciones les cantaban. Sería una forma de conocer que sus bisabuelos y abuelos también se divierten ¿No creen? ¡Démosle un espacio a los abuelos y bisabuelos para que canten y bailen con nuestros hijos!



Con esta reflexión y recordando los clásicos del Tío Herminio, les paso: Las rejas de Chapultepec.


Más información:
Restaurante Mirabel: San Luis Potosí esquina con Mérida. Col. Roma
Mezcalería Vulgar: San Luis Potosí 196-B Col. Roma









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