Rock Demers: Una vida dedicada al cine para niños (parte 1)

Primera parte de mi entrevista con el productor de cine infantil, Rock Demers, quien nos cuenta por qué no ha dejado de ser niño y cuál es el mensaje que tienen sus películas...

Hace unas semanas se llevó a cabo el 15º Festival Internacional de Cine para niños (...y no tan niños), donde le rindieron homenaje al productor, Rock Demers, quien ha dedicado su vida a la producción de cine infantil. El homenaje a Demers, no era para menos, un hombre que en 1980 creó la productora La Fête (la fiesta), para realizar Tales for All (cuentos para todos) una antología de 9 películas para toda la familia. Debido a su éxito, se extendería a 12 películas y hasta la fecha lleva más de 15 filmes que cuentan historias para todo público.

La visión de Demers ha sido aclamada por la critica canadiense (dos de sus películas fueron galardonadas con el Golden Reel Award), por la crítica estadounidense (En 1992 ganó el Emmy a mejor película para jóvenes, por el filme Vincent y yo) y por la crítica mundial, en 1994 ganó la condecoración de excelencia en entretenimiento para niños por la UNESCO, con su película Bach y Brócoli.

Gracias a la Matatena, Asociación que organiza el Festival Internacional de Cine para niños (...y no tan niños), tuvimos la oportunidad de conocer a Demers, y digo tuvimos, porque en las proyecciones el productor se presentaba y los niños se acercaban a él a saludarlo, a felicitarlo y a estrecharle la mano, esa oportunidad en cualquier festival de cine es invaluable.

Así conocí al Señor Rock Demers, una persona que desde la primer palabra que crucé con él, me contagió de energía y pasión por contar historias. Fue un gran aprendizaje intercambiar palabras con Demers.

A continuación les comparto la plática que tuvimos afuera de la sala Julio Bracho de la UNAM, no sin antes agradecer a Liset Cotera, Directora de la Matatena y del Festival de Cine para niños (...y no tan niños) por todo su apoyo; a Lizbeth Cruz, Directora de Difusión de la Matatena y del Festival.., por darme el espacio para platicar con el Señor Rock Demers.

También quiero agradecer a la periodista Cynthia Arvide, quien realizó la traducción simultánea de esta entrevista. Cuando me dijeron que Demers era de Québec, lo primero que vino a mi mente fue: Je me souviens (Yo recuerdo) es el eco de la historia de Québec, un pueblo que tiene memoria y deseo de independencia. Quise respetar su historia, su cultura y su lengua, por eso me salió hacer la entrevista en francés; el idioma de su corazón y vaya que con el corazón en la mano, me platicó lo siguiente:

PAPÁSDF: ¿En algún momento uno deja de ser niño?

ROCK DEMERS: Espero que no. Es esencial, yo creo, guardar y mantener al niño que fuimos.

PAPÁSDF: ¿Tú has dejado de ser niño?

RD: no

PPDF: Yo tampoco (risas)

PPDF: ¿Quién tiene más peso a la hora de escoger los proyectos, el niño o el adulto de Rock Demers?

RD: Para mi es el niño. Lo que produzco son películas, que tienen un cierto nivel de calidad y varios niveles de entendimiento, no es superficial. Yo siempre me aseguro que todos tengan una lectura y ese primer nivel de lectura es para un niño que tenga 8 años de experiencia de vida. Si hay una película para niños que sea solo para niños, no es una buena película, debe de tener un mensaje a otro nivel.

PPDF: Es algo que tú defines entre las películas infantiles y las películas familiares.

RD: Claro, por ejemplo las películas de Charlie Chaplin o las de Disney son familiares. Por ejemplo, con Tarzán, un niño lo va a ver pero no se va a identificar a un nivel más profundo con su realidad y su experiencia, en esa película.

Las películas que yo produzco, que llamo para niños, el personaje principal son niños entre 10 y 12 años; a veces con adultos en el rol secundario, que son actores reconocidos pero que pasan a segundo término por la historia del niño.

PPDF: Hablando de los actores ¿es difícil encontrar actores niños?

RD: Es muy diferente para encontrar a los actores, hay que encontrar a un niño que sea exactamente como lo narra el guión, cuando eso sucede es mágico; en cambio los adultos pueden hacer diferentes personajes y roles, pero cuando un niño no corresponde a lo que pide el guión, no va a ser muy bueno.

PPDF: ¿Qué mensaje te gusta pensar que los niños se quedan con tus películas?

RD: Más que un mensaje, es una filosofía de vida. No importa qué tipo de película sea, de acción, con efectos especiales o lo que sea; siempre va haber en el fondo un mensaje muy claro que es: ATENCIÓN, LA VIDA NO ES FÁCIL, ES DIFÍCIL. PERO ES POR ESO QUE VALE LA PENA SER VIVIDA.

PPDF: ¿Y para los padres?

RD: Para los papás hay otros niveles, como el libro del Principito, lo podemos leer a los 8 años, a los 15, a los 20, a los 50 y siempre descubrimos cosas nuevas. Me gustaría que mis películas fueran, en el cine, el equivalente de lo que es el Principito en la literatura.

PPDF: Con la productora La Fête, crecieron otros proyectos a demás de Tales for All, como el documental ¿qué respuesta han tenido los niños ante este género?

RD: Los documentales que hace La Fête son para adultos, pero a los niños sí les interesa el género documental, sobre todo a niños entre 10 y 12 años. Los documentales pueden tener un lugar importante en el cine infantil, estoy absolutamente convencido.

PPDF: ¿Es importante que los niños estén enterados de la realidad?

RD: Absolutamente, su realidad alrededor de ellos y en general alrededor del mundo. Por ejemplo en Tales for All, todas las historias son contemporáneas, no son históricas, ni de ciencia ficción, ni animadas; todos los personajes están inmersos en un mundo que es actual y que nos debemos de identificar.

Aquí termina la primer entrega de la entrevista de PAPÁSDF con el productor Rock Demers, estén pendientes el próximo jueves para leer la segunda parte: Nos cuenta su visión de los medios de comunicación para niños; nos platica la historia de su nueva película, que espera realizar en nuestro país y nos dice cuál es su película favorita.

Para los papás: Demers dijo algo importante “Es esencial guardar el niño que fuimos” Así que cuéntenme, ¿qué es lo que más les gusta de ser niñ@? ¿Jugar, imaginar, asombrarse del mundo o aprender? Te invito a que participes en la encuesta y revivas con tu hij@ aquello que tanto te gusta.