Entre Piaget y los memes del chapo: La contrucción de la narcocultura en nuestros hijos.
Como aparece en la sección Opinión de EstadoMayor.mx
Mi hija y yo nos enteramos de la fuga de "El Chapo", nos damos cuenta de los memes que empiezan a circular en redes sociales.Yo reflexiono sobre cómo una niña percibe esta información, qué sucede en su construcción moral. Me doy cuenta de la estructuración mediática que lleva a la fascinación de la narcocultura. Propongo acciones para establecer un análisis crítico, para y con nuestros hijos, de la realidad que nos está tocando vivir.
Mi hija y yo nos enteramos de la fuga de "El Chapo", nos damos cuenta de los memes que empiezan a circular en redes sociales.Yo reflexiono sobre cómo una niña percibe esta información, qué sucede en su construcción moral. Me doy cuenta de la estructuración mediática que lleva a la fascinación de la narcocultura. Propongo acciones para establecer un análisis crítico, para y con nuestros hijos, de la realidad que nos está tocando vivir.
El domingo por la mañana estábamos
desayunando en casa de mis papás. Ahí nos enteramos que "El
Chapo" había escapado de la cárcel. Fue tal la sorpresa que se
presentó la discusión del tema sobre la mesa, sin más. Sofía, mi
hija, preguntó qué quién era "El Chapo" y qué había
pasado. Cabe mencionar que en ese momento, todos los adultos de la
mesa estábamos con nuestros dispositivos móviles para saber más de
la nota, la inmediatez de la información. De un momento a otro salió
la primer sátira visual, o meme de la fuga; después otro, después
otro, después un desplegado de diferentes versiones y contenidos,
devaluando a nivel risorio lo que había pasado.
Sofía estaba ahí, una niña de
ocho años escuchando que alguien se había escapado y viendo
imágenes de "Mi villano favorito" con la cara de otro
señor, o del Chavo del Ocho con otra cara y el texto " El chapo
del ocho". Personajes que a ella le gustan, que son parte de su
realidad y que ahora los veía fuera de contexto. Información
encontrada, contradictoria, que para una niña se vuelve percepción;
establece una construcción de la realidad y crea una valoralización
de los hechos y la información que recibe.
El biólogo y psicólogo Jean Piaget
en su libro " El criterio moral en el Niño", establece que
niñas y niños de dos a seis años entienden las normas morales, "lo
bueno" y "lo malo", como reglas concretas e imposibles
de variar. Son un elemento importante y externo, porque están
impuestas por los adultos. Cuando niñas y niños tienen de siete a
once años, las normas ya no tienen su origen solamente en una
autoridad adulta o exterior, sino que el respeto y la sensación de
justicia entre sus iguales o amigos también es importante. En esta
parte se desarrolla la honestidad y la justicia.
Entre Piaget y los memes del Chapo,
encuentro dos puntos para analizar: Por un lado, es importante que
los adultos informemos el hecho a nuestros hijos, y establezcamos
dónde empieza y dónde termina la sátira. Si nosotros nos quedamos
en el discurso de la sátira, el desarrollo o la construcción moral
de nuestros hijos e hijas se establecerá desde ese nivel; donde en
los juegos infantiles ahora prefieren ser narcos que policías, o
juegan a la droga imaginando que los bloques de plástico que antes
usaban para construir castillos, ahora son pacas de cocaína. Desde
ese nivel también niños y niñas pueden alzar la mano y protestar
porque se prohiban los narcocorridos como sucedió en el 2011 en
Sinaloa. Es desde ese nivel donde la narcocultura se ve fascinante e
indefensa, lejana de la realidad que conlleva. No existe una
diferenciación seria entre aquello que es correcto de aquello que no
lo es. No hay una construcción moral, y esto hace que el primer
eslabón del tejido social se encuentre en quiebra. ¿Cómo será el
adulto que de niño jugó a que era narco? ¿En dónde quedan los
arquetipos de superhéroes de la infancia que hacen valer la justicia
y el orden? Como adultos los cuestionamos, pero para niños y niñas
es importante que existan para su propia construcción moral. Para
niños y niñas, la autoridad absoluta en la primera y en parte de la
segunda infancia (como lo establece la UNICEF) son las y los adultos;
por lo mismo es importante desde qué nivel abordamos las noticias,
porque nuestros hijos aprenden de nuestros actos en todo momento.
Con esto llego al segundo punto por
analizar: ¿Cómo promover el uso de la información desde el
análisis y la crítica? ¿Cómo ayudar a niños y niñas a construir
una moral autónoma, madura? Esto es parte fundamental del trabajo en
casa, hacernos responsables de las noticias que vemos, de los medios
en donde los vemos y qué hacemos con los mensajes que nos llegan.
Darnos cuenta que lo que se publica en los medios, ahora más que
nunca, es directamente proporcional a nuestra calidad de vida. Lo que
vemos publicado nos afecta a todos los eslabones de la sociedad, ya
no está alejado de nuestra realidad inmediata; eso implica tomar
consciencia. Hacernos responsables como consumidores mediáticos,
pero también como adultos de referencia para niños y niñas; ser
guías y actuar desde un nivel crítico. Establecer un diálogo con
hijos e hijas de lo que opinan, de lo que piensan o de lo que creen
que sucede. Hablar, correspondiente a la edad de nuestros hijos,
sobre lo que pasa en las noticias. Hablar de cómo nos sentimos al
respecto, proponer soluciones a nuestro alcance para aportar un
cambio, y cumplirlas. Pasar del discurso a la acción. Platicar las
noticias, más en estos momentos de sobreinformación, que conllevan
a una desinformación.
Desde esta reflexión, me senté con
Sofía y platicamos de lo que estaba pasando. Hablamos sobre los
memes que había visto y le resolví sus dudas. Seguimos desayunando.
Yo me quedo todavía cuestionando
por qué los periódicos nacionales le dan un espacio a publicar los
memes del día y cómo el #PosMeEscapo llegó a ser Trending Topic, o
tendencia, sin ningún esfuerzo. Me parece que la fuga de Joaquín
Guzmán Loera "El Chapo", se merece un análisis más
serio,una crítica más de fondo...fichas de adulto como dirían por
ahí.