Llegamos
al Pata Negra y ya estaba todo preparado para recibir a niñas y
niños: globos por todas partes, un piso de colores especial para que
los peques jueguen, mesas para sentarse a comer y un escenario listo
para empezar la obra.
Ese
domingo se presentaba un teatro circense. Mientras pasaba el tiempo,
más familias entraban y se acomodaban para disfrutar la comida. Mi
hija y yo llegamos a las dos de la tarde y ya había mesas ocupadas,
nos sentamos y nos avisaron que el espectáculo empezaba en media
hora, mientras podíamos ordenar una entrada y algo de beber. Como
había mucho calor, mi hija decidió una limonada para empezar, yo
pedí una chelita. Me gustó mucho que tuvieran un menú especial
infantil; hay pasta, hamburguesas o salchichas e incluye un jugo. Los
precios no son muy elevados, el menú está en 55 pesos y las
porciones son suficientes para los peques. Mi hija pidió la pasta y
le encantó.
La comida
para adultos también es de calidad y a buen precio. Hay una gran
variedad de tapas españolas: montaditos, papas bravas, croquetas de
jamón o de atún y mucho más. También hay sándwiches y platos
fuertes. Yo pedí unas croquetas y después un sándwich de pollo en
salsa de miel, los recomiendo bastante.
Lo que me
gustó de este concepto es que es un espacio familiar, muy relajado
que solo el Pata Negra puede dar. Mientras mi hija y yo platicábamos
y disfrutábamos la comida, me acordaba de aquellas noches cuando
visitaba este lugar con mis amigas y amigos para bailar y disfrutar
unas copas. Ahora iba con mi hija para comer y divertirnos con un
espectáculo teatral. Vi con detenimiento a los papás y mamás que
nos acompañaban esa tarde y parecía que todos estábamos en lo
mismo: conocimos el Pata Negra como bar, ahora lo disfrutábamos en
una tarde de restaurante con nuestros peques. Esto es pensar en las
necesidades del cliente.
Las
música es la misma que distingue a este lugar: un poco de Jazz,
Rock, mezclado con ritmos tribales. Ya eran las dos y media de la
tarde y empezó el espectáculo. "Bienvenidos al Circo de
Bolsillo", esta compañía trae un concepto interesante, porque
juegan mucho con la imaginación de niñas y niños. Hay una clown,
un malabarista y una narradora, solo son tres pero hacen un show de
una hora muy divertido y diferente. De pronto adultos y niños
estábamos metidos en un circo que creamos con nuestra imaginación,
viendo cómo el malabarista detenía una silla con su frente y hacía
muchos trucos más. Hubo risas, momentos de asombro, aplausos y mucho
baile tanto chicos como grandes. Eso me gustó todavía más, que los
adultos también pudimos disfrutar y asombrarnos con el espectáculo,
además de pasarla bien con nuestros chilanguitos.
Después
de una hora, el teatro terminó, pero siguió la música. Niñas y
niños jugaba con los globos, papás y mamás cantábamos canciones
de The Cure que empezaron a sonar por las bocinas del lugar, se
volvió como una reunión familiar o con los amigos, donde todos
disfrutábamos del momento.
El Pata
Negra es una opción diferente para pasarla bien en familia: buena
comida, buen servicio, buena música, cultura y mucha diversión. Les
recomiendo llegar media hora antes de que comience el espectáculo
porque solo hay seis mesas y me ocupan rápido. Esto es lo
interesante del lugar, que es chico y el ambiente es más íntimo
familiar.
Más
información:
Pata
Negra: Tamaulipas 30 esquina Juna Escutia, Col. Condesa. Teléfono:
52115563
Para
ver cartelera:www.patanegra.com.mx